• Inicio
  • Blog
  • Teoría de la Motivación e Higiene de Frederick Herzberg
Teoría de la Motivación e Higiene de Frederick Herzberg

Teoría de la Motivación e Higiene de Frederick Herzberg

Artículo de Arturo Esquivel Moreno

Una teoría de psicología ampliamente aplicada en empresas mexicanas, así como en organizaciones alrededor del mundo, es la Teoría de la Motivación e Higiene de Frederick Herzberg, también conocida como la Teoría de los Dos Factores. Esta teoría, enfocada en la motivación laboral, distingue entre factores de higiene (o factores extrínsecos) y factores motivacionales (o factores intrínsecos) en el ambiente de trabajo.

Factores de Higiene:

Los factores de higiene se refieren a elementos del entorno laboral que pueden causar insatisfacción si están ausentes o son inadecuados, pero su presencia no necesariamente motiva a los empleados a trabajar más duro. Incluyen aspectos como:

- Condiciones de trabajo

- Políticas de la empresa

- Seguridad laboral

- Salario

- Relaciones con los compañeros y supervisores

En el contexto de las empresas mexicanas, asegurar condiciones laborales seguras, políticas claras y justas, y una remuneración adecuada son fundamentales para prevenir la insatisfacción laboral.

Factores Motivacionales:

Los factores motivacionales están relacionados con el trabajo en sí y cómo el individuo se siente acerca de su trabajo, incluyendo:

- Reconocimiento

- Oportunidades de crecimiento personal y profesional

- Responsabilidad

- Logro

- La naturaleza del trabajo mismo

Estos factores pueden llevar a una mayor satisfacción y motivación en el trabajo, resultando en un desempeño laboral mejorado. En empresas mexicanas, la implementación de programas de reconocimiento, el fomento del desarrollo profesional y la asignación de responsabilidades que retan y enganchan a los empleados pueden ser estrategias efectivas para mejorar la motivación y, por ende, la productividad.

Aplicación en Empresas Mexicanas:

La aplicación de la Teoría de Herzberg en empresas mexicanas implica realizar un diagnóstico organizacional para identificar los factores de higiene que necesitan mejorarse y los factores motivacionales que pueden ser potenciados. Por ejemplo, una empresa podría implementar programas de capacitación y desarrollo profesional para sus empleados, reconociendo sus logros y promoviendo un ambiente de trabajo que ofrezca retos y oportunidades de crecimiento. Al mismo tiempo, es crucial asegurar que las condiciones básicas de trabajo y las políticas de la empresa no generen insatisfacción.

Implementar cambios basados en esta teoría requiere un enfoque holístico que considere tanto el entorno laboral como las oportunidades de desarrollo personal y profesional, promoviendo un clima organizacional que fomente tanto la satisfacción como la motivación entre los trabajadores. Esto puede conducir a una fuerza laboral más comprometida y productiva, beneficiando tanto a los empleados como a la organización en su conjunto.

Artículo de Arturo Esquivel Moreno

Te puede interesar
Cerrar X